Maribel Suárez Mancha

martes, 11 de febrero de 2014

Decanos de ULA-Mérida podrán suspender clases por violencia

Se planteó una suspensión general, pero posteriormente autoridades universitarias indicaron que dan a cada decano la opción de considerar lo que se presente en las próximas horas, de mantenerse las protestas, que por momentos se han tornado violentas. En horas de la noche, los bachilleres visitaron la sede de Polimérida a reclamar por sus compañeros.

Hasta avanzada la tarde y noche se mentuvieron las protestas (Cortesía José León)
NORA SÁNCHEZ |  ESPECIAL PARA EL UNIVERSAL
lunes 10 de febrero de 2014  10:31 PM
Mérida.- En horas de la noche de este lunes las autoridades de la Universidad de Los Ándes, Núcleo Mérida, indicaron que han dado a cada decano, por facultad, la libertad de decidir si aplican la suspensión de clases si se mantienen los cuadros de violencia que se vienen dando desde la semana pasada.

En principio se había planteado la suspensión absoluta de las actividades, pero posteriormente se indicó que será en función de lo que ocurra en cada lugar y de los actos que pudiesen comprometer la integridad física de las personas y las estructuras de la sede universitaria.

La tarde de este lunes las protestas estudiantiles se intensificaron en la ciudad de Mérida, al punto que hubo enfrentamientos entre policías y estudiantes y nuevos detenidos.

Las inmediaciones del viaducto Campo Elías, calle 26, avenida Cardenal Quintero y la esquina del Centro Comercial Yuan Lin, fueron escenarios de los enfrentamientos.

De la batalla campal resultaron detenidas ocho personas, quienes aún en horas de la noche no pudieron ser identificadas por los estudiantes.

Los jóvenes fueron llevados por funcionarios de policiales a la sede de la Gobernación del estado y a la sede de Polimérida, por "lanzar piedras", dijeron los estudiantes.

Detenciones y denuncias

En horas de la noche, los bachilleres se encontraban a las afueras de la sede de Polimérida, ubicada en el sector Glorias Patrias, exigiendo la libertad de los detenidos y denunciaron que los mantienen retenidos sin cumplir el debido proceso, "porque no les permitieron ingreso a los abogados defensores".

Las protestas pacíficas que protagonizaron los estudiantes en horas de la mañana, se tornaron violentas al final de la tarde, colapsando totalmente la ciudad y convirtiéndola en un campo de batalla.

Funcionarios de Polimérida con equipos antimotines y la ballena, se observaron en varios sectores de la urbe estudiantil reprimiendo las protestas a las que se le sumó un apagón que por aproximadamente media hora dejaron a sectores del norte y centro de la ciudad, totalmente a oscuras y que fue producto de una falla en el circuito 4 de la sub estación Mérida.

En Ejido, municipio Campo Elías del estado, donde está ubicada la sede de la Universidad Politécnica Territorial "Kléber Ramírez", los estudiantes se sumaron a las protestas de sus compañeros de Mérida y también exigieron la libertad de los bachilleres detenidos en la ciudad de Coro.

Habitantes de los sectores donde se produjeron los enfrentamientos y arreciaron las protestas, informaron del toque de cacerolas, comercios cerrados y un ambiente tenso en los alrededores.

Pasadas las nueve de la noche, los focos de violencia y las barricadas se mantenían en varias zonas de la ciudad.

El saldo de heridos

El sexto día de protestas estudiantiles en Mérida dejó un nuevo saldo de 6 personas heridas.

Dos estudiantes (uno de bala y otro por golpes), un vigilante de la Universidad de Los Andes (ULA) con arma de fuego en la clavícula y 3 funcionarios policiales por balines.

Denunciaron acción de motorizados

Grupos de motorizados estuvieron presentes en los enfrentamientos y recorrieron las calles de la ciudad.

Desde el sistema de transporte masivo, trolcable, ubicado en el sector Paseo de La Feria, los trabajadores denunciaron que motorizados, a quienes no pudieron identificar, dispararon contra la infraestructura, lo que obligó el cierre del sistema y generó alarma y zozobra en la población.

Policía privado de libertad

El funcionario policial José Eliécer Guerrero Saavedra quien se puso a derecho por disparar a quemarropa contra el estudiante José Gregorio Suárez el pasado viernes, fue privado de libertad.

Saavedra fue imputado por la presunta comisión de los delitos de homicidio calificado en grado de frustración, uso indebido de armas orgánicas y quebrantamiento de pactos internacionales suscritos por la República y permanecerá recluido en la Comandancia General de Polimérida.