Desde la Central de Trabajadores y Trabajadoras Alianza
Sindical Independiente, consideramos de vital importancia la Salud y Seguridad
en el Trabajo (SST) de los trabajadores/as venezolanos, porque el trabajo no puede costarnos la vida.
La organización
Internacional del Trabajo OIT) registra a nivel mundial 250 millones de
accidentes laborales de los cuales 1,2
millones son muertes relacionadas con el trabajo, mientras que en Latinoamérica
y el Caribe se han registrado entre 20 y 27 millones de accidentes laborales,
de los cuales 27.270 han sido accidentes mortales según información
del Banco Interamericano de Desarrollo. Estas cifras muestran el drama que
existe a nivel mundial de como los trabajadores no solo se juegan la salud en
su labores diarias sino que a muchos les está costando la vida.
El caso de Venezuela también
es alarmante, según las más recientes estadísticas de Instituto Nacional de Prevención de Salud y
Seguridad Laborales (INPSASEL), para el
año 2014 fueron formalizados 52.458 accidentes laborales, ocurriendo el mayor número
en la zona central del país: Carabobo (10.236), seguido de Aragua(7.625) y
Miranda(6.866). Cuando revisamos en
detalle observamos que están ocurriendo aproximadamente 1.008 accidentes laborales por semana, es
decir, más de mil familias del país sufrieron mensualmente la difícil situación
de tener de baja médica uno de sus integrantes. A esta alarmante cifra, se le
suma los casos no registrados, las cifras en “negro” de los casos de trabajadores/as que asisten a los centros
médicos por haber sufrido accidentes laborales, pero el deficiente sistema estadístico
de registros hospitalarios no registra ningún ítem para plasmar tan importante
dato.
El drama continua y las
cifras negras de accidentes laborales de Venezuela sigue aumentado cuando revisamos las cifras de la
economía informal, teniendo en cuenta que Instituto Nacional de estadística e
informática (INE) reportó en el 2014 que
el 40,5% de la fuerza laboral es
pertenecen al sector de la economía informal el cual carece de un adecuado
servicio de salud y seguridad en el trabajo. Tampoco los tercerizados y el
importante número de mano de obra de inmigrantes, especialmente de China, son
reflejados en las estadísticas de INPSASEL, por lo que sin temor a dudas
podemos afirmar que están muy lejos de reflejar la realidad de la seguridad y
salud laboral de Venezuela.
Esta situación de
invisibilidad de las cifras reales de accidentes laborales y enfermedades
ocupacionales bajo ningún concepto puede seguir siendo ignorada, porque estamos
seguros que fueron más de 247 los
accidentes mortales que sucedieron en el país en el 2014, y que por
ninguna razón se puede seguir permitiendo que a los trabajadores su jornada laboral
les cueste la vida
Es por esta razón, que
nuestra Central Sindical junto a la
Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Central Sindical de las Américas(CSA) centrará sus esfuerzos en revindicar la triple
transformación con la cual nos hemos comprometido y que se requiere para facilitar la acción sindical en salud y
seguridad laboral: 1) Hacer visible lo invisible, 2) convertir lo individual en
colectivo y 3) transformar la percepción en acción. Esta triple transformación
tiene como objetivo fundamental eliminar
o controlar los riesgos en los centros de trabajo desde la prevención, con la
participación activa de los
trabajadores/as, y las organizaciones
gremiales y/o sindicatos que los representan.
Desde la Estrategia
Iberoamericana de Salud y Seguridad en el Trabajo de la CSA, se plantea que “el
movimiento sindical debe reivindicar y ejercer con firmeza el protagonismo que
le corresponde en salud y seguridad en el trabajo, fortaleciendo su acción
sindical con capacidad de propuesta (con los apoyos y alianzas necesarios),
eligiendo sus propias prioridades sobre las que centrar el debate y
construyendo posiciones prácticas que contribuyan a definir estrategias
nacionales en Seguridad y Salud en el Trabajo, identificar prioridades de
actuación sobre colectivos, sectores y riesgos, y redefinir y fortalecer
mecanismos eficaces de participación y diálogo social en seguridad y salud en
el trabajo en igualdad de condiciones”, planteamiento que enarbolamos desde esta nueva Central Sindical por medio
del cual reivindicamos el hecho de que el
trabajo decente debe ser trabajo seguro.
Para cumplir con esta
importante meta de la Central de Trabajadores/as Alianza Sindical Independiente,
proponemos que la organización, formación e información en
materia de salud y seguridad laboral forme parte de nuestra plan de acción
anual ,apuntando nuestros esfuerzos
al fortalecimiento
organizacional por medio de la creación
de las secretarias o seccionales de salud y seguridad laboral, a nivel de
nuestras Federaciones, Colegios profesionales, Sindicatos de base, y demás
organizaciones, lo cual nos permitirá contar con sindicalistas formados en la
materia que puedan asesorar y resguardar la salud laboral de los trabajadores
venezolanos.
De igual forma consideramos
importante la información oficial suministrada desde INPSASEL y el INE, la cual
puede ser mejorada por medio de la acción sindical de de la tripartita en políticas nacionales que apunten ambientes
saludables que permitan una labor más eficiente y productiva a la par de un
mejor estado de salud del colectivo laboral. Constituye una punto de vital
importancia lograr que al ingresar a los hospitales y clínicas privadas se
establezca en el cuestionario de entrada si el accidente ha sido en el lugar de
trabajo o por causas laborales, con el objetivo de hacer más reales las cifras
que se manejan a nivel gubernamental en
materia de accidentes laborales y enfermedades ocupacionales..
Especial importancia debe
darse en Venezuela al hecho de que ya contamos con una Ley Orgánica de
Prevención, Salud y Seguridad Laboral, pero la misma no es suficiente, tal y
como se puede evidenciar en los casos de Amianto o asbesto donde solo nos
quedamos en protocolos de desmontaje, transporte, almacenamiento y desecho pero
se siguen permitiendo importación hasta por “mercado libre” de elementos de la
industria en general, con contenidos de amianto que han sido prohibidos en
Europa, por lo que se requieren leyes que prohíban de una vez por todo el amianto en cualquiera
de sus formas comerciales, para evitar convertirnos en un receptor de
materiales cancerígenos en donde el capital está por encima de la salud
laboral.
Desde la Dirección Nacional
de Salud Laboral y Ambiente expresamos la urgente necesidad de crear las
Secretarias o seccionales de Salud y
Seguridad Laboral en la base Sindical, que puedan servir de apoyo para
transmitir la información pertinente desde la Central a la base Sindical, los
delegados y delegadas laborales y los Inspectores e Inspectoras de INPSASEL.
Ratificamos nuestro apoyo
total y rotundo al Convenio 155 de la OIT en materia de salud laboral, en el
cual además de relacionar los factores
de riesgo, situaciones y condiciones que deben tenerse en cuenta para prevenir
daños a la salud, señala entre las grandes esferas de acción de la política en
materia de Salud y Seguridad en el Trabajo:
la formación , la comunicación y cooperación, y la protección de los
trabajadores y las trabajadoras y de quienes les representan contra toda medida
disciplinaria resultante de acciones emprendidas con motivo de protegerse
frente a accidentes o daños a la salud”.
Desde la Central de
Trabajadores Alianza Sindical Independiente nos corresponde la labor de
orientar a nuestros afilados a incluir cláusulas
en materia de salud laboral y ambiente de trabajo, que mejoren las establecidas
en el ordenamiento jurídico vigente, y
que permitan acciones y movilizaciones de la fuerza laboral que
garanticen su fiel cumplimiento.
Ing. Maribel Suarez Mancha
Directora Ejecutiva de Salud
y Seguridad Laboral
Central de Trabajdoras/es Alianza Sindical Independiente