Sector universitario se une para discutir una Convención Colectiva Única
Escrito por Marianli Suárez Valera/Fotos: Jairo Nieto
Por primera en la historia, profesores, empleados y obreros de las universidades del país se sientan en una misma mesa de negociación para discutir las cláusulas del contrato colectivo único, que regirá por los próximos dos años en el sector, con la participación de los sindicatos y federaciones que agrupan a los profesores, empleados y obreros, así como representaciones de las autoridades rectorales y de las carteras ministeriales de la Educación Universitaria y del Trabajo.
Jesús Rivas, presidente de Evaluación y Seguimiento de la Federación Nacional de Sindicatos y Obreros de la Educación Superior, Fenasoes, subrayó que en años anteriores, cada sector universitario (docentes, empleados y obreros) discutía por separado su convención colectiva, lo cual originó desigualdades en los beneficios socio-económicos y descontentos entre los gremios universitarios. Este año se está haciendo de manera conjunta.
“Luego de una gran lucha que hemos tenido los trabajadores universitarios desde el año 2009, hemos logrado sentarnos en una mesa de trabajo y tratar de unificar todos los sectores en una normativa única, cumpliendo con la deuda social que tenía el gobierno”.
El nuevo contrato incluye una solicitud de retroactivo desde el año 2009, aumento de salario, del ticket alimentario a 30 días, incremento de las primas por hogar y por hijo, unificación de un sólo sistema de salud para los trabajadores del sector, así como homologación de los sueldos y 120 días de vacaciones.
Un total de 13 federaciones de centros universitarios del país se sumaron a las discusiones de la nueva convención colectiva que regirá por los próximos dos años en el sector y que favorecerá a unos 170.000 universitarios.
Entre las casas de estudios que se agregaron se encuentran las cinco asociaciones de profesores de la Universidad de Oriente (UDO), Universidad Centro Occidental Lisandro Alvarado (UCLA), Universidad Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo), Universidad del Zulia (LUZ), Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET) y la Universidad Simón Bolívar (USB).
Jaime Liscano, secretario general de Soucla, indicó que ya fue nombrada la comisión de la UCLA que se encargará de las discusiones de la nueva normativa laboral.
“A pesar de ser un proyecto es un gran logro, hemos dado un paso adelante. Desde el 2010 trabajamos con un comando intergremial que está en la calle para exigir al Gobierno que cumpla las obligaciones contractuales”.
Apucla se une
Por su parte, la profesora Deborah Velásquez de Valecillos, presidenta de Apucla destacó que, a pesar de no ser invitados a la asamblea, se unirán a esta propuesta, sobre todo en la lucha por una reivindicación que nivele los sueldos y salarios del sector universitario, más aún con la devaluación del bolívar.
“Los docentes no hemos recibido los ajustes salariales en base a las normas de homologación y estamos convencidos en que tenemos que resolver la situación de los educadores universitarios, obreros y administrativos pues nos afecta el común denominador que es el día a día”.
Destacó que entre las propuestas de las cláusulas socio-económicas, se encuentra una suma bastante ambiciosa de casi el 200%, tomando en cuenta los aumentos que no se efectuaron.
“Estamos aspirando lo que nos corresponde. El ajuste es necesario y justo”.
Asimismo, indicó que continuarán en sus jornadas de protesta activa, no sólo por la parte salarial sino también por el presupuesto universitario y beneficios que poseen tanto profesores como estudiantes.
Jesús Rivas, presidente de Evaluación y Seguimiento de la Federación Nacional de Sindicatos y Obreros de la Educación Superior, Fenasoes, subrayó que en años anteriores, cada sector universitario (docentes, empleados y obreros) discutía por separado su convención colectiva, lo cual originó desigualdades en los beneficios socio-económicos y descontentos entre los gremios universitarios. Este año se está haciendo de manera conjunta.
“Luego de una gran lucha que hemos tenido los trabajadores universitarios desde el año 2009, hemos logrado sentarnos en una mesa de trabajo y tratar de unificar todos los sectores en una normativa única, cumpliendo con la deuda social que tenía el gobierno”.
El nuevo contrato incluye una solicitud de retroactivo desde el año 2009, aumento de salario, del ticket alimentario a 30 días, incremento de las primas por hogar y por hijo, unificación de un sólo sistema de salud para los trabajadores del sector, así como homologación de los sueldos y 120 días de vacaciones.
Un total de 13 federaciones de centros universitarios del país se sumaron a las discusiones de la nueva convención colectiva que regirá por los próximos dos años en el sector y que favorecerá a unos 170.000 universitarios.
Entre las casas de estudios que se agregaron se encuentran las cinco asociaciones de profesores de la Universidad de Oriente (UDO), Universidad Centro Occidental Lisandro Alvarado (UCLA), Universidad Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo), Universidad del Zulia (LUZ), Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET) y la Universidad Simón Bolívar (USB).
Jaime Liscano, secretario general de Soucla, indicó que ya fue nombrada la comisión de la UCLA que se encargará de las discusiones de la nueva normativa laboral.
“A pesar de ser un proyecto es un gran logro, hemos dado un paso adelante. Desde el 2010 trabajamos con un comando intergremial que está en la calle para exigir al Gobierno que cumpla las obligaciones contractuales”.
Apucla se une
Por su parte, la profesora Deborah Velásquez de Valecillos, presidenta de Apucla destacó que, a pesar de no ser invitados a la asamblea, se unirán a esta propuesta, sobre todo en la lucha por una reivindicación que nivele los sueldos y salarios del sector universitario, más aún con la devaluación del bolívar.
“Los docentes no hemos recibido los ajustes salariales en base a las normas de homologación y estamos convencidos en que tenemos que resolver la situación de los educadores universitarios, obreros y administrativos pues nos afecta el común denominador que es el día a día”.
Destacó que entre las propuestas de las cláusulas socio-económicas, se encuentra una suma bastante ambiciosa de casi el 200%, tomando en cuenta los aumentos que no se efectuaron.
“Estamos aspirando lo que nos corresponde. El ajuste es necesario y justo”.
Asimismo, indicó que continuarán en sus jornadas de protesta activa, no sólo por la parte salarial sino también por el presupuesto universitario y beneficios que poseen tanto profesores como estudiantes.
